Calamares rellenos

 

Calamares rellenos.

           Aunque reconozco que soy más de carne, hay platos del mar que siempre me han gustado y este es uno de ellos. Quizá… porque me recuerda a mi niñez o tan solo porque es de mojar pan. En fin, lo cierto es que es un plato relativamente fácil y se puede quedar muy bien. Vamos a ello.

 

Ingredientes: (2 personas)

• ·         4 calamares medianos
• ·         3 huevos
• ·         3 tomates maduros
• ·         1 cebolla mediana
• ·         1 vaso de vino blanco
• ·         Agua
• ·         Sal y pimienta
• ·         1 hoja de laurel.
• ·         Harina 

 

Elaboración:

👉Elegir los calamares es importante. Te los vas a encontrar limpios, los que vienen de la india y otros lugares. A mi me gustan los nacionales que vienen con piel, son algo más caros, pero merecen la pena. Pero bueno, para gusto… los colores.

👉Lo primero que tenemos que hacer es limpiarlos. Dejaremos el tubo del calamar sin aletas ni patas. Yo, para esta elaboración, le quito la piel. Reservamos.

👉Limpiamos la cebolla y la picamos fina.  Ponemos aceite en un recipiente, lo justo para cubrir el fondo de este, y añadimos la cebolla y un poco de sal. Las patas y las aletas reservadas, las cortamos en trozos y las añadimos también.

👉Mientras, se hace el sofrito se ponen los tres huevos a hervir unos doce minutos.

👉Rallamos los tomates y los añadimos al sofrito. Salpimentamos y le ponemos una hoja de laurel.

👉Cuando tengamos el sofrito terminado, añadiremos los huevos duros que ya tendremos cocidos y enfriados, troceados. Mezclamos y ya tenemos la “farsa” con la que vamos a rellenar los calamares cerrándolos con un palillo para que no se salga. No meter el laurel. Nos sobrará sofrito que dejaremos en el recipiente donde vamos a seguir cocinando.

👉Una vez tengamos los calamares preparados, los pasamos por harina y los doramos un poco. La harina servirá también para espesar la salsa. Una vez dorados, añadimos el sofrito que nos ha sobrado de rellenar los calamares, la hoja de laurel, un vaso de vino blanco y un poco más de agua (como medios vaso) Añadimos un poco más de sal y pimienta y volvemos a poner la hoja de laurel. Ahora toca dejar que cueza a fuego moderado bajo unos 30-40 minutos. Ir moviendo de vez en cuando y controlando que no quede sin caldo. Si lo tenéis a fuego bajo y casi tapado, os quedara salsa suficiente para mojar bastante pan.

👌Por cierto, os aconsejo que hagáis de más. Quedan perfectos de un día para otro.